¡Hola, mundo! Esto es Errantia, un rincón que hemos creado entre David y yo sin un rumbo fijo, pero con muchas ganas de explorar.
El nombre surgió casi por azar, pero luego descubrimos que Errantia es el nombre de un gusano marino (Acciculata) y, además, en latín significa «extraviarse». Nos pareció perfecto: un blog donde nos perderemos entre ideas, curiosidades y lo que nos apetezca compartir.
De momento, este es solo un saludo al vacío. Pero si has llegado hasta aquí, ya no estamos solos. ¡Nos leemos pronto!
Hello, world!
¿Qué puede haber más propio para comenzar una aventura que el retorno del primer ejemplo básico de cualquier libro sobre lenguajes de programación?
Errantia (nominativo/vocativo/acusativo plural neutro de errāns): vagabundo, descarriado, divagante, (de)ambulante, disperso, y, por supuesto, errante. Un buen concepto con el que «clasificar» los contenidos que iremos publicando en este formato. Además, como bien dice el co-partícipe de este proyecto, también denomina a un grupo de gusanetes marinos (sobre cuya clasificación no se ponen de acuerdo los científicos, oh, sorpresa),